¿Qué es?
Blue Plasma es un sérum con acción exfoliante, antioxidante y anti-glicación. Se utiliza antes de la hidratante, mañana y noche. Está dirigido a todo tipo de piel, especialmente a las más sensibles por el tipo de ingredientes en los que se basa su fórmula.
¿Qué lleva?
Base de agua.
- Carnitina: Es un aminoácido antioxidante, su acción principal es la de combatir la glicación (proceso que debilita y destruye el colágeno y la elastina por el consumo de azúcar).
- Gluconolactona (PHA): Polihidroxiácido con propiedades antioxidantes, exfolia la piel. Es el ácido más recomendado para pieles sensibles porque proporciona resultados similares al ácido glicólico sin resecar y con un porcentaje menor de posibilidades de sufrir irritaciones. No es fotosensible.
- Urea: En concentraciones de más de 15% es un agente queratolítico, es decir, exfolia. En más bajas, es un agente hidratante y emoliente.
- Maltodextrina: Humectante que además potencia el efecto de los demás principios activos.
- Enzimas de huevas de salmón: Según Perricone MD, proporcionan una exfoliación enzimática.
- Phosphatidylcholine: Repara la piel, es un vehículo para mejorar la penetrabilidad de los demás principios activos.
- Hialuronato de sodio: Ácido hialurónico, hidrata la piel.
- Aloe Vera: Anti-irritante.
Ha sido, junto con la mascarilla de ácido láctico de Dr. Sebagh, los únicos ácidos que he usado este verano. La textura de este sérum es un poco pringosa, es muy líquido aunque cunde mucho. Se extiende muy bien y la mitad de la pipeta da para rostro y cuello sin problemas. Los primeros días, parece que deja la cara un poco pegajosa, sensación que desaparece una vez aplicada la crema o el protector solar.
Lo que más me llamó la atención los primeros días de uso fue su alta capacidad hidratante. En verano, hidrata prácticamente lo mismo que un fluido o una loción para piel mixta-grasa. He de decir, que en verano, mi piel es más grasa y necesita menos hidratación. Así que cambié mi hidratante por el sérum y lo utilicé conjuntamente con el FPS físico de Dr.Sebagh. No engrasa, no reseca y no hay efecto rebote. No hay rojeces, no hay hipersensibilidad.
Día tras día la piel se va suavizando, alisa y pule mucho los poros. Normalmente, cuando uso un producto de exfoliación química, el hecho con el que compruebo si me exfolia debidamente o no, es el afeitado. La cuchilla se deslizaba más que bien, de una pasada, como utilizando fórmulas agresivas de la farmacia a base de ácido glicólico.
El beneficio principal, tras unos días de uso, es luminosidad en la piel. Está más luminosa, suave y lisa, a la vista y al tacto. Unifica el tono y calma las rojeces. ¿Merece la pena el producto?, depende del caso. Primero, es un sérum para pieles muy sensibles, para pieles que no soportan otro tipo de ácidos o pieles que quieren seguir exfoliándose en verano. Además hay que tener en cuenta que no es una fórmula vacía sólo a base de ácido como lo que podemos encontrar en Neostrata, por ejemplo. Las pieles que necesiten un tratamiento más intensivo deberían buscar fórmulas más concentradas. Es un ejemplo de sérum antioxidante y exfoliante para pieles jóvenes que desean prevenir y mantener el tono de la piel unificado. Sin dudarlo, repetiría con él, es un muy buen producto.